Al margen de una encuesta sobre las actitudes y temores del pueblo dominicano que auspició la Agencia Central de Inteligencia en 1962, en el país se han estado realizando sondeos de opinión pública electoral desde 1974 cuando el periódico La Noticia contrató los servicios del Centro de Investigación y Mercadeo Social (CIMERS), que dirigía Luis Augusto Caminero hijo, para medir las preferencias de los votantes de la ciudad capital en un proceso en el que se disputaban la presidencia Silvestre Antonio Guzmán Fernández, Joaquín Balaguer, Francisco Augusto Lora, Jaime Manuel Fernández, Pedro Delmonte Urraca y Luis Homero Lajara Burgos.
A mediados de 1965, la CIA organizó otra consulta para averiguar por quién votarían los dominicanos en septiembre de ese año.
Cuando el vespertino La Noticia confió su encuesta a CIMERS, en 1974, publicó un editorial en el que afirmaba que ofrecía ese servicio a sus lectores “por primera vez en la República Dominicana”. Ante la pregunta de “¿Cuál de los candidatos le agrada más para la presidencia?” los capitaleños respondieron: 44.01 por ciento a favor de Guzmán; 33.9 por ciento por Balaguer; 8.11 por ciento por Lora; 0.64 por Jaime Manuel Fernández; 0.42% por Delmonte Urraca y Lajara Burgos. La abstención sería mínima.
Éste manifestó que las encuestas de opinión pública decían disparates, tratando de restar validez a la revelación y aseguró que una compañía le ofreció una encuesta con resultados favorables a él por la suma de 25 mil pesos. Caminero lo emplazó a identificar públicamente la supuesta firma.
Hasta el presente, otros medios de comunicación han contratado firmas encuestadores en vísperas de elecciones: El Nacional, Hoy, El Siglo, Listín Diario, Revista Ahora, Rumbo, Ultima Hora, El Caribe, entre otros, han tenido a Violeta Yangüela y Asociados, Stanford Klappers Associates, de Puerto Rico; The Gallup Organization, Princeton, New Jersey (El Siglo); Roper Starch Worlwide; Tesis Consultora; Mercadesa, de Rafael Acevedo Pérez; Penn & Schoen, representada en el país por Bernardo Vega; Sigma-2; Ahora/Demoscopia, Hamilton & Staff...
Cada resultado desencadena alegría, frustraciones, estímulos en aspirantes y sufragantes. En los periódicos surgen réplicas y contrarréplicas de medios y directores de sondeos por las reacciones de inconformidad y disgusto de líderes en desventaja, como ocurrió con Juan Bosch y el periódico HOY en 1986.
Esta es la primera entrega de una serie de trabajos con los que Ángela Peña sigue paso a paso, la presencia de las encuestas políticas en el país, señaladas con un comienzo en 1962 cuando la CIA utilizó a estudiantes de la rebelde UASD para sondear a la opinión pública. Los que hicieron el trabajo de campo no se imaginaban quién pagaba.
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